La Fundación Alfonso Ortega ha abierto con brillantez la exposición fotográfica que recoge imágenes del libro ‘Nostalgia del Ayer II’ que sale a la venta por un precio de 20 euros. El pasado sábado tuvo lugar la presentación del mismo en un acto celebrado en su sede en Cehegín ante un buen número de invitados. El público puede visitar la exposición por las tardes de 18.30 a 20.30 horas del 27 octubre al 7 de noviembre. Los días 1 y 2 de noviembre el horario se amplía a las mañanas de 11.00h a 13.00 h.

La  doctora en Arqueología y directora durante décadas del Museo de Santa Pola, María José Sánchez Fernández, nacida en Cehegín, fue la encargada de presentar la publicación. En su intervención habló de la misma como un paseo por «tres décadas de historia en fotografías inéditas que cumple a la perfección su objetivo de ser una crónica recopilatoria de Cehegín». Y es que las 267 fotografías incluidas en sus páginas, «muestran una gran diversidad de personas, en las que yo destacaría su humanidad por encima de su nombre. Personas que, sumadas, revelan el espíritu del Cehegín más vivo, en constante evolución». Por su parte, el presidente de la Fundación, Alfonso Ortega Sánchez, intervino para agradecer el apoyo recibido. La profesora y periodista, Esperanza Abril, se encargó de dar la bievenida y conducir el acto.

Alfonso Ortega recordó a los asistentes que «desde que en septiembre de 2006 presentamos la primera parte del libro ‘Nostalgia de Ayer’, con la exposición fotográfica en los Pollos del Partidor, han pasado ocho años y lo que un principio parecía tarea fácil de realizar difícil ha resultado». También hizo hincapié en que «han sido más de dos años de trabajo dedicados a prepararla, durante los cuales he tenido que escanear cientos de fotos, ponerles pies e identificar los años y las personas que en ellas aparecen. Ha sido necesario construir más de 40 maquetas para que el libro que hoy se presenta sea una realidad y llegue a todos ustedes en el mejor estado posible».

Además, tuvo palabras de reconocimiento por las colaboraciones realizadas por Abraham Ruiz Jiménez, «por ese magnífico recorrido por los años cincuenta, a lo largo del cual denota ser gran conocedor de las costumbres, personas y lugares»; Juan González Castaño, por «su narrativa amena, breve y, a la vez, tan profunda» en su relato de los años sesenta; y Salvador Ruiz de Maya, que reseña la década de los años setenta «de forma tan magistral». Por último, se refirió al prólogo realizado por Salvador García Jiménez, en cuya descripción del pasado «pone los olores de nuestro pueblo en cada una de las estaciones del año», así como al artículo de José María Alcázar Pastor, que relata el germen de la ciudad de Begastri.

Tampoco se olvidó de agradecer, igualmente, a todos los amigos que le han dejado sus fotografías. Así citó a Isabel Fernández, Josefina de Maya Ramón Piñero, María José Sánchez, Maravillas de Maya, Fernando Corbalán, María Semitiel, Cosme Fernández, Pablo Juárez, entre tantas otras familias. Para finalizar, recordó a personas que ya no están «desde la admiración y el cariño». Alfonso Ortega hizo referencia a su madre, Carmen Sánchez, fallecida en junio de 2013, así como también amigos como El Chava, Alfonso El Motolite, Paco El Tori, y vecinos como Paco de la Demetria, Pedro el Madrugás, El Dioni y muchos más. «Que este libro, del que formáis parte, os sirva de homenaje en vuestra ausencia», concluyó.