El yacimiento del Pleistoceno ‘La Cueva Negra’, situado en el Estrecho del Río Quípar en La Encarnación, celebra este domingo 19 de julio una jornada de puertas abierta. Expertos y estudiantes de distintos países se han dado cita este mes de julio en este paraje de alto valor arqueológico para participar en la 26ª campaña de excavación, que se desarrolla cada verano con la colaboración del Ayuntamiento de Caravaca de la Cruz y la Universidad de Murcia

El director científico de la campaña de excavación arqueológica en ‘La Cueva Negra’, el profesor Michel J. Walker, se encarga de explicar a los asistentes la importancia de este yacimiento, convertido en referente internacional para el estudio de la evolución humana. Los hallazgos de las últimas excavaciones confirman que es en este yacimiento donde se localiza la evidencia de empleo de fuego por el hombre más antigua de Europa.

‘La Cueva Negra’ tiene una antigüedad de entre 780.000 y 900.000 años, según indican los estudios de biocronología y el paleomagnetismo. Además del fuego, los hallazgos más significativos documentados son abundantes restos de fauna de la época, y una industria lítica achelense, con el descubrimiento del bifaz más antiguo de Europa, y musteriense. De hecho, ha sido objeto de estudio de numerosos científicos internacionales, de universidades de Arizona, Boston, Oxford y Lyons, con desplazamientos al propio yacimiento o través de estudios en sus laboratorios.

Los trabajos están coordinados por la Asociación Murciana de para el Estudio de la Paleontología y el Cuaternario (Mupantquat), bajo la dirección arqueológica de los profesores Michael J. Walker, Mariano López Martínez y María Haber Uriarte. El equipo de trabajo está formado por una veintena de personas, entre ellos voluntarios procedentes de la Universidad de Murcia, distintas universidades del Reino Unido, así como de Australia (Westem y Queensland) o Nazarbayev University (Kazajistán).

La campaña de 2015 concluye el próximo día 23. En esta ocasión, los objetivos han consistido en profundizar en las capas más antiguas. De hecho, el profesor de la Universidad de Murcia, Mariano López, explicó en una entrevista en la cadena SER que el gran resto es la búsqueda de restos humanos, «para conocer más acerca de los primeros pobladores de esta zona». Y señaló que «se podrían considerar a éstos como los primeros cocineros de España y de Europa». De hecho, sobre su forma de alimentarse, dijo que «eran caza-recolectores y basaban su alimentación en animales de todo tipo, desde elefantes hasta pequeños roedores, y por supuesto todo tipo de vegetales que tenían a mano».

Por otra parte, la consejera de Agricultura y Agua, Adela Martínez-Cachá, destacó en su reciente visita la importancia de este yacimiento arqueológico “como motor para el desarrollo del entorno rural de la zona”. Lo hizo durante la presentación junto con la presidenta de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado, Inmaculada García, y el alcalde de Caravaca de la Cruz, José Moreno, del décimo de Lotería Nacional del pasado 11 de julio que estuvo ilustrado con el hallazgo arqueológico del hacha de mano localizada en el año 2003.

Dicho útil es un bifaz achelense tallado por sus dos caras, con la típica forma de almendra de las hachas de mano. Hay que tener en cuenta que los bifaces encontrados con mayor antigüedad en el mundo son algunas hachas de mano y hendedores de hace 1,7 millones de años en África oriental. También se han documentado con más de 1 millón de años en Palestina y la India. La pieza de La Cueva Negra está datada por biocronología y paleomagnetismo entre hace 780 y 900.000 años. Con una antigüedad similar a la de Cueva Negra se encuentran también en Israel. Se suelen llamar bifaces “achelenses” por referencia a un yacimiento en el norte de Francia denominado Saint-Acheul.