La Guardia Civil, en el marco de la operación ‘Aguas Rubias’, ha desarrollado una investigación para esclarecer unos supuestos daños en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Bullas, que ha culminado con la investigación de dos sociedades mercantiles y cinco de sus responsables, como presuntos autores de delito de daños valorado en 70.000 euros.

Las pesquisas se iniciaron en el mes de febrero, cuando el SEPRONA de la Guardia Civil recibió una denuncia en la que el jefe de planta de la citada EDAR comunicó haber detectado niveles alarmantes de parámetros contaminantes en las aguas residuales industriales.

Especialistas del Equipo de Investigación del SEPRONA llevaron a cabo la oportuna inspección ocular y toma de muestras, de forma conjunta con el personal de IPROMA, empresa concesionaria de la Entidad de Saneamiento y Depuración de Aguas Residuales de la Región de Murcia (ESAMUR).

Por un lado, la inspección permitió determinar la continuidad en el tiempo de vertidos inasumibles por la planta de gestión, y por otro, la acreditación -mediante el correspondiente análisis de las muestras obtenidas- de la superación de los valores máximos admisibles de parámetros contaminantes. Estos valores, que superarían lo establecido en el Decreto 16/1999, de 22 de abril, sobre vertidos de aguas residuales industriales al alcantarillado, suponen un potencial riesgo de perjuicio al dominio público hidráulico.

La investigación ha concluido con la identificación de dos sociedades mercantiles, ubicadas en la zona, supuestamente relacionadas con los vertidos. Los investigados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Mula.